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SUS MONOPLAZAS LLEVAN DOS DÉCADAS EN LO MÁS ALTO
Adrian Newey, el alquimista imparable de Red Bull
Pueden prohibir los difusores soplados, los 'agujeros' del fondo plano e incluso la refrigeración de los frenos: el Red Bull de Adrian Newey sigue peleando. Los vehículos diseñados por este ingeniero han ganado 16 Mundiales entre Williams, McLaren y ahora la escudería de las bebidas energéticas.
Dietrich Mateschitz, propietario de Red Bull, decidió a finales de 2005 fichar al mejor. No, no al mejor piloto, sino al mejor ingeniero. El objetivo de la escudería de las bebidas energéticas era, primero, ganar grandes premios y, segundo, pelear el Mundial de Fórmula 1. Para lograrlo, Mateschitz tentó al que está considerado como uno de los mejores ingenieros de la historia de la Fórmula 1. Newey ha inspirado diseños que han ganado hasta 16 títulos mundiales.
Red Bull ha puesto en tela de juicio la supremacía de McLaren y Ferrari
Titulado en Aeronáutica y Astronáutica, Newey comenzó a labrar su leyenda en Fórmula 1 en los 90. El Williams FW14 sería el primero de una lista de monoplazas victoriosos que acumulan casi un centenar de victorias en grandes premios. Sus diseños también vencieron seis títulos de Pilotos y otros tantos de Constructores entre Williams y McLaren. Cuando Newey llegó a la Fórmula 1, la aerodinámica era un campo por explorar y aprovechó la coyuntura.
En noviembre de 2005 se confirmó su traspaso al equipo Red Bull Racing tras años de rumores sobre su marcha de McLaren. Mateschitz otorgó plenos poderes a Newey y los resultados no se hicieron esperar; Red Bull ha puesto en tela de juicio la supremacía de McLaren y Ferrari tras dar a la escudería un equipo campeón en un tiempo relativamente corto para un proyecto tan joven.
Con el RB5 llegaron las primeras victorias, seis, y los dos subcampeonatos. Aquel Mundial fue para Brawn, pero lo habría sido de Red Bull si no hubiera sido por el doble difusor pergeñado por Ross Brawn. En 2010, Newey evolucionó un RB6 que no sentenció el Mundial antes de Abu Dabi gracias al virtuosismo de Alonso en su primer año en Ferrari y a la falta de fiabiliadad al inicio del Campeonato.
RB7: uno de los mejores monoplazas de todos los tiempos
Sin embargo, en 2011 Newey se superó y creó uno de los mejores monoplazas que se recuerda: el RB7. El coche, sumado al gran año de Vettel, barrió al resto de vehículos de la parrilla. Todas las escuderías trataron de imitar el sistema de difusores de Red Bull, si bien la FIA minimizó el uso del sistema en 2012, quizá con el objetivo de igualar el Mundial.
Posteriormente han prohibido los 'agujeros' del fondo plano del RB8 y hasta el sistema de refrigeración, pero Red Bull sigue dando guerra este 2012. El pasado año Newey fue nombrado OBE (oficial de la Orden del Imperio Británico) en reconocimiento a sus servicios al deporte del motor. Newey venció con Williams y McLaren, dos escuderías que ya habían ganado títulos anteriormente a su llegada. Sin embargo, en Red Bull ha construído de la nada un equipo que ahora es doble campeón del Mundo.
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