La evolución del incendio de Ayora, que las autoridades han considerado como un accidente involuntario, ya era muy buena y se ha logrado controlar al cabo de horas. Ya no hay llama en el perímetro y los equipos terrestres aún sellan y refrescan la zona.
Durante el día han trabajado en el control y extinción del fuego veintiún medios aéreos y numerosos terrestres, que han logrado perimetrar el incendio y han centrado sus esfuerzos en refrescar los puntos calientes.
El fuego se declaró alrededor en una finca conocida como La Menora, y provocó el desalojo de un centenar de niños que se encuentran bien. Los niños se encontraban en una granja-escuela que se libró de las llamas por apenas 500 metros.
En cuanto al accidente que lo habría producido, todo apunta al sobrecalentamiento de una cosechadora, según ha informado el alcalde de la localidad, José Vicente Anaya.
Anaya ha explicado que al parecer, una cosechadora que estaba trabajando con cebada en la zona, se sobrecalentó y se prendió. En ese momento, comenzó a arder todo el rastrojo y los trabajadores no pudieron hacer nada por controlarlo, "pese a que lo intentaron", ha destacado.
"Fue un accidente involuntario totalmente", agregó el primer edil, quien no obstante ha señalado que el incendio está en fase de investigación "y ya se determinará todo".
Cabe decir que cerca de 120 efectivos han estado trabajando a lo largo de las últimas horas en la extinción de este incendio forestal.
