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BORRADOR DEL IDEARIO DE PODEMOS

Podemos defiende parar obras en puertos, aeropuertos y AVE, aunque afecte negativamente al PIB

La formación que lidera Pablo Iglesias ha presentado ya sus esperadas propuestas en materia económica que cambian algunos de los primeros mensajes que lanzaba el propio Iglesias. Mientras que antes defendía que había que dejar de pagar determinados capítulos de la deuda pública, ahora sostiene que hay que analizarla y reestructurarla. Podemos también deja de proponer una renta por ley para todos los ciudadanos y ahora solo lo contemplan para quienes no tengan posibilidad de otros ingresos.

El documento de medidas económicas que usará Podemos para elaborar su programa electoral recoge la necesidad de declarar una moratoria de "grandes obras" en puertos, aeropuertos o el AVE, "sin tener miedo al efecto aparentemente negativo en el plazo inmediato sobre los indicadores convencionales de crecimiento económico", es decir, el Producto Interior Bruto (PIB).

Así se detalla en una de las medidas que recoge el documento titulado 'Un proyecto económico para la gente', de 68 páginas, elaborador por los economistas Vicenç Navarro y Juan Torres por encargo de Podemos, y que la formación liderada por Pablo Iglesias someterá a debate con sindicatos, empresarios y representantes de todos los sectores sociales, con el objetivo de elaborar un programa de gobierno "realista" y "pragmático".

En su plan de medidas, los catedráticos defienden que una de las "máximas prioridades" de un futuro Gobierno de Podemos debe ser diseñar "una estrategia global de sostenibilidad para la economía española", que garantice "un gran apoyo público", financiado entre otras cosas "mediante recursos procedentes de la reforma fiscal y de la imprescindible revisión de la política actual de grandes obras e infraestructuras" en puertos, aeropuertos o el AVE.

"Concretamente, proponemos la creación de una comisión plural y de la máxima solvencia técnica que elabora una evaluación de la política de grandes inversiones en infraestructuras que en los últimos años ha sido la fuente principal de corrupción y de gastos de mantenimiento desorbitados y sin apenas rendimiento social", detallan.

Por todo ello, defienden que "debería declararse una moratoria de este tipo de obras e inversiones que no han contemplado rigurosamente el balance entre costes y beneficios privados y sociales", y que habría que hacerlo "sin tener miedo al efecto aparentemente negativo en el plazo inmediato sobre los indicadores convencionales de crecimiento económico".

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