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Confinamiento por COVID-19
Una sanidad oxigenada y control de contactos de nuevos contagiados: las claves para la desescalada
Ildefonso Hernández, catedrático de salud pública, cree que la vuelta a las actividades no esenciales no llevará reflejado un aumento de los casos de coronavirus porque muchas han empresas han disminuido la actividad y las que trabajan lo hacen con planes de contingencia que pueden hacer que los potenciales casos de enfermedad sean mínimos.
Respecto a los 40.000 test al día que dice estar haciendo Sanidad, considera Hernández que el número de pruebas variará las tendencias por lo que hay que tenerlo en cuenta a la hora de interpretar los datos.
La letalidad del virus en España está actualmente en el 10%, sin embargo cree que este porcentaje bajará a medida que se hagan test. "Veremos una representación aproximada de su evolución para tomar medidas en el momento adecuado", señalaba.
Para Hernández saber cuánto va a durar la inmunidad es una de las claves de esta crisis sanitaria. Los indicios dicen que es probable que la inmunidad proteja en el próximo otoño e invierno a quienes hayan pasado ahora la infección. Sobre un posible rebrote cree que el servicio sanitario tiene que tener un respiro limitando la atención a los servicios primarias e introducir la telemedicina. Considera también fundamental que cuando haya casos nuevos de COVID-19 se registren los contactos y se hagan pruebas al entorno.
Establece que se están haciendo muchos estudios clínicos para ver si se puede establecer una relación causal entre el uso de un fármaco y el efecto positivo que pueda tener en un paciente con coronavirus. Ha avanzado que en las próximas semanas habrá noticias positivas a este respecto.
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