GANÓ 11 OSCAR

El motivo por el que Titanic casi se hunde antes de empezar su rodaje: "Esto no va a funcionar"

Titanic es una de las películas más importantes de la historia del cine. Sin embargo, la producción estuvo a punto de hundirse antes de su estreno. ¿Qué fue exactamente lo que pasó y cómo esquivó el iceberg?

El hundimiento del Titanic en la película de James Cameron

Publicidad

Si a alguien se le dijera hoy en día que Titanic apuntaba a ser un apoteósico fracaso en taquilla, sin duda esa persona pensaría que quien hace tal afirmación ha perdido la cabeza. No es para menos. La película de James Cameron se convirtió desde el día de su estreno en una de las cintas más épicas de la historia y se coronó como la reina de los Oscar (ex aequo con Ben-Hur y El señor de los anillos: El retorno de rey). Sin embargo, cuando todo estaba en fase de producción, las previsiones eran bien diferentes.

La crisis empezó cuando el productor, Jon Landau, estaba buscando la localización para recrear el océano Atlántico y llevar al barco a sus profundidades. Tal y como él mismo, ya fallecido, reveló en sus memorias The bigger picture, Fox y Cameron tenían puntos de vista muy diferentes sobre cómo se debía afrontar la hoja de ruta.

"Jim se negó a ir a ver el lugar hasta que el estudio nos diera luz verde, pero el estudio no nos la daba hasta que finalizáramos el presupuesto", relataba Landau en el libro; haciendo referencia al lugar en el que él mismo confiaba para hacer realidad el rodaje. "Encontramos un lugar ideal en el sitio más inesperado: Rosarito, México", detallaba antes de aclarar que era "improbable porque, mientras que el Titanic se hundió en las aguas heladas del Atlántico Norte, México es la tierra del sol".

El director James Cameron
El director James Cameron | Getty Images

Finalmente, Fox cedió y llegó el día en el que Cameron visitó el posible set. Allí, se pretendía construir todo un mar a escala y llevar la maqueta del barco del Titanic que medía seis metros. Sin embargo, todo estuvo a punto de desmoronarse.

Y es que el propio director de la película se escandalizó ante la decisión de Landau: "¿En qué estabas pensando? ¡Hay luces allá! ¡Hay una colina allá! ¡Cómo demonios va a ser esto en medio del océano! ¡Que todos regresen a Los Ángeles! ¡Esto no va a funcionar!".

Por suerte, el productor sabía bien que todo esto era solo el primer paso: "Jim tiene un proceso, que he llegado a comprender. Primero duda, luego reconsidera". Según escribía, Cameron "tardó veinte minutos en modificar ligeramente la maqueta del barco"; para, finalmente, gritar: "¡Landau! ¡Es perfecto! ¡Es el único lugar donde podemos rodar la película!".

Kate Winslet, Leonardo DiCaprio y James Cameron, en el rodaje de 'Titanic'
Kate Winslet, Leonardo DiCaprio y James Cameron, en el rodaje de 'Titanic' | Cordon Press

Ahora bien, cabría pensar que este fue el único contratiempo que sufrió la producción; pero nada más lejos de la realidad. El presupuesto se había disparado y la prensa comparaba Titanic con "Ishtar , Waterworld y Cleopatra , los fracasos más notorios de la historia de Hollywood". Una situación que Landau aprendió a aceptar con naturalidad: "Siempre que intentas algo grande, lo arriesgas todo. Tu reputación, tu carrera, tu sustento: cosas importantes están en juego".

En los despachos de Fox la tensión se podía cortar con un hilo, incluso cuando todo eran rumores: "Terminas persiguiendo fantasmas, lo cual puede ser mortal". Una situación que se mantuvo hasta el día más importante de todos, cuando la productora decidió hacer un pase de prueba antes del estreno: "Había mucho en juego en la proyección. Mucho en juego".

El productor afirmaba en su libro que todo dependía de los primeros minutos, durante los cuales ya sabrían "si tendríamos alguna posibilidad". En la sala se hizo el silencio cuando arrancó la película y el equipo lo dio todo por perdido, llevándose las manos a la cabeza mientras se susurraban unos a otros un contundente "estamos muertos".

Jack y Rose en una de las escenas de 'Titanic'
Jack y Rose en una de las escenas de 'Titanic' | 20th Century Fox

Sin embargo, de pronto, la situación cambió. "El público se concentró en la acción. Al final, gritaban y lloraban", recordaba Landau. Aquellos infernales primeros minutos habían sido una confusión, ya que los allí presentes pensaban que iban a ver otra película. En su defecto, fueron los primeros afortunados en ver una de las cintas más grandes de todos los tiempos.

Sin la visión de Jon Landau para dar con la localización, su capacidad de convicción frente a James Cameron o la paciencia de todo el equipo a pesar de los rumores, Titanic se habría hundido mucho antes de colisionar con el iceberg. Por suerte para todos, la épica historia de Jack y Rose llegó a salas y el público la recibió con los brazos abiertos, siendo todavía hoy en día una película que está en boca de todos.

ObjetivoTV» Cine

Publicidad