TEN ESTO EN CUENTA

Cómo congelar el marisco para tenerlo listo para estas navidades

Aunque el marisco es un plato estrella en Navidad, debes saber que no todos los tipos de marisco se pueden meter en el congelador. A continuación, te explicamos cuál puedes y cómo hacerlo correctamente.

Publicidad

El marisco es un plato imprescindible y estrella en una mesa navideña. De hecho, para la mayoría de las personas es difícil imaginar una nochebuena o una Navidad sin gambas, langostinos y ostras. Sin embargo, es un producto demasiado caro, pero sobre todo en los días previos a las fiestas porque su precio aumenta. Por lo que una opción puede ser comprar el marisco fresco días antes y meterlo en el congelador para que esté perfecto para la cena de Navidad. A continuación, te explicamos cómo congelar el marisco correctamente para evitar que se estropee.

No todos los mariscos se congelan de la misma forma. En el caso de los crustáceos como el centollo, el bogavante, el buey de mar y los langostinos se recomienda comprarlos vivos y antes de meterlos en el congelador cocerlos. Una vez que lo hayas cocido, lo dejas enfriar y lo envuelves en un paño humedecido con el agua de la cocción. Si eres muy aprensivo para comprar al animal vivo quizá sea mejor que lo compres ya congelado.

El marisco gallego
El marisco gallego | Internet

En el caso de los langostinos, tal y como se muestra en el video, coge film transparente, envuélvelo e intenta quitar todo el aire. Cuando realices estos pasos, ya estará listo para guardarlo en el congelador. No olvides que para descongelarlo debes meterlo en el frigorífico 24 horas antes del consumo.

Sin embargo, en el caso de los moluscos, como las almejas, tienen un procedimiento más sencillo de congelar. Para ello, solamente debes limpiarlos con agua para eliminar la suciedad que tienen en la parte externa. Posteriormente, revisa que todos estén en buen estado, pero si te encuentras alguno muerto retíralo antes de congelarlo.

Debes saber que existen mariscos que no es recomendable congelar como los percebes, los mejillones y las ostras, por lo que te tocará comprarlos frescos el día de antes o el mismo día para evitar que pierdan el sabor y se estropeen.

Seguro que también te interesa...

Cómo descongelar el marisco y conservar su sabor y textura

Novamas» Cocina

Publicidad