Un policía nacional fuera de servicio rescató el pasado fin de semana a un joven de 15 años que se precipitó a una cala de Denia (Alicante), desde una altura de diez metros, cuando estaba realizando fotografías del paisaje, según ha informado la Policía en un comunicado. El agente bajó inmediatamente al lugar donde cayó la víctima -la cala Tallada- para evitar que se ahogara y, pesar de las heridas sangrantes y tener ambos brazos fracturados, le introdujo en un hueco que había entre las rocas para ponerlo en una posición segura y así avisar a los servicios de emergencias.
El joven estaba semiinconsciente y en estado de shock. Una vez puesto a salvo la víctima, solicitó la colaboración de su hermana, que se encontraba en la parte superior de la cala, para avisar a los servicios de emergencias. Debido a la falta de cobertura, el policía le pidió que fuera al final de la senda.
Los hechos ocurrieron el sábado por la tarde, en la denominada cala Tallada de Dénia. Un policía fuera de servicio que se encontraba en el lugar observó cómo una persona estaba "muy nerviosa" porque, al parecer, su amigo se había precipitado desde una zona elevada de unos 10 metros de la montaña al agua mientras se realizaba una foto con el paisaje.
El agente bajó por la cala de difícil acceso y localizó al joven, semiinconsciente con ambos brazos fracturados y en estado de shock en el agua, colocándolo en un pequeño hueco que había en las rocas para que no se ahogara y realizándole las primeras asistencias.
Debido a la gravedad de las lesiones que presentaba, el agente llamó inmediatamente a los servicios de emergencias, aunque no pudo ponerse en contacto por la falta de cobertura y pidió a su hermana, que se encontraba en la parte alta de la montaña, que fuera al final de la senda que daba acceso a la cala y que realizara una llamada. El policía dio indicaciones de las heridas que presentaba la víctima, así como que el único acceso posible para su evacuación era por el agua.
Mientras acudían los servicios de emergencia, y ya que la víctima se encontraba empapada de agua y la única prenda que vestía era el bañador, el policía y varios amigos del herido utilizaron las camisetas y las toallas que llevaban consigo para taparla y así evitar que perdiera la temperatura corporal ya que tenía continuos temblores, mientras controlaba en todo momento las constantes vitales. En el lugar se personaron cuatro bomberos del Consorcio de Alicante y una lancha tipo 'Zodiac' de salvamento, que con la ayuda de todos, consiguieron poner a salvo a la víctima y posteriormente trasladarla al Hospital de Dénia donde quedó ingresada.
