La práctica del café pendiente se extiende en las cafeterías de nuestro país

La iniciativa del 'café pendiente' nació en Italia en 2008. La idea comienza con una cadena de consumiciones de café. El consumidor paga el suyo primero y alguno más para quienes no puedan pagarlo. Cuando las personas sin recursos económicos preguntan si hay algún café pendiente, si es el caso se le invita a un café que ha pagado previamente otro consumidor.

Muchas cafeterías se han sumado a esta iniciativa que empieza a calar en nuestro país. Los que participan en esta propuesta altruísta aseguran que "es más bonito dejárselo a alguien que lo necesite que pedir un café para uno mismo". Además de pagar cafés pendientes hay quienes incluso pagan desayunos o menús enteros solidarios para los que menos tienen.