Un brigadista de 59 años murió cuando un cambio de viento le sorprendió apagando uno de esos focos en Orense. En Galicia ya ha sido detenido un hombre como presunto autor de uno de esos fuegos. Continúan las altas temperaturas por lo que el riesgo de nuevos incendios es muy elevado.
La persistencia de la sequía, con suelos muy resecos por la escasez de lluvias, afecta en estos calurosos primeros días de primavera a Galicia, Asturias y Cantabria, donde múltiples incendios forestales ya han provocado la muerte de un brigadista en Ourense y han quemado centenares de hectáreas.
Persisten activos, aunque muchos ya controlados, varios focos en las tres comunidades y, por ejemplo en Asturias, se ha activado el nivel 1 del Plan de Incendios Forestales ante la magnitud y cantidad de los mismos y se han reforzado los medios aéreos contra incendios para tratar de extinguir los 55 que aún quedan activos.
Ayer esta comunidad sufrió más de 95 incendios que han afectado a 27 municipios y han movilizado a más de 300 personas, según el gobierno regional. Las previsiones del tiempo indican que las temperaturas en el Principado se van a mantener por encima de los 20 grados y sin que aparezca la lluvia, con viento flojo del sur.
Quince incendios forestales, activos en Cantabria a última hora de la tarde
Quince incendios forestales permanecen activos a última hora de la tarde en la comunidad de Cantabria, donde más de 520 personas luchan contra las llamas que ya han arrasado más de 650 hectáreas, mientras que la Guardia Civil ha identificado a dos supuestos implicados, uno de los cuales está detenido.
Desde ayer y hasta se han declarado en la región 33 incendios forestales, de los cuales 5 ya han sido extinguidos, otros 13 ya están controlados y el resto, 15, permanecen activos, según ha informado el Gobierno de Cantabria en un comunicado.
