José Manuel Muíño, el cedeirés que colecciona 'clicks' de Playmobil: "Tengo unos pocos miles de figuras"

Para algunos pueden parecer unos simples juguetes, pero para otros los ‘clicks’ de Playmobil son una auténtica pasión. Es el caso de José Manuel Muíño, un vecino de Cedeira (A Coruña) que a sus 55 años tiene infinidad de estas figuras con las que se pueden crear pequeños mundos: “Tengo unos pocos de miles”, dice entre risas.

Su ‘fiebre’ por los Playmobil comenzó desde muy joven: “Cuando era pequeño tenía lo que podía: una Game Boy, un Madelman… Pero de aquellas ya me gustaban. Fue a partir de los 18 años cuando empecé a comprarlos”, explica.

Su trabajo en la Infantería de la Marina le permitía viajar por todo el país y adquirirlos en diferentes tiendas. “Después conocí a mi mujer y llegaron los hijos, que fueron la excusa perfecta para seguir comprándolos. Cuando ellos tuvieron 15 años ya me dijeron que no querían más, pero yo seguía cada vez peor”, bromea. Tanto es así que se tuvo que hacer con un bajo para poder guardarlos: “Teníamos una habitación en casa, pero ya no era suficiente”, explica.

Entre tantos ‘clicks’ hay algunos que sobresalen por el cariño que les tiene: “Tengo cariño a muchos. Uno de ellos es un barco de pesca que compré hace 25 años en una ferretería de Guitiriz (Lugo). Ahora ya no está en el mercado”, comenta Muíño. Precisamente, en la actualidad encontrar este tipo de figuras a precios asequibles es cada vez más difícil: “Ahora hay que tirar de segunda mano”.

Una exposición en su localidad natal

A pesar de llevar casi tres décadas coleccionando estas figuras, no fue hasta hace seis años cuando comenzó a exponerlas en público. Ahora participa por primera vez en una muestra en su tierra natal, concretamente en el Museo Mares de Cedeira: “Después de tantos año, nunca fui profeta en mi tierra hasta ahora”, dice entre risas José Manuel -que en la Asociación Española de Coleccionistas de Playmobil, AESCLICK, es conocido como Playmocedeira-.

En la exposición se puede disfrutar de cinco dioramas: uno sobre la prehistoria, otro sobre la batalla de Lepanto, uno de piratas, una escenificación sobre James Cook y el último relacionado con el mar -que incluye estampas típicas de una villa marinera-. “La exposición está gustando muchísimo, la gente se queda alucinada”, dice orgulloso.

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