El Oasis of the Seas, de la naviera Royal Caribbean, que es el crucero más grande del mundo, ha atracado este sábado en Barcelona, y hasta el domingo concentrará la visita de 57.770 cruceristas, en lo que supone el fin de semana más intenso del año.
El Oasis of the Seas tiene una eslora de 362 metros, pesa 225.282 toneladas y puede alojar hasta a 6.318 pasajeros, y realizará tres salidas desde Barcelona antes de someterse a una puesta a punto en en Rotterdam (Holanda).
El barco, que ha llegado procedente de Miami y que hace algunos días estuvo en Málaga, cuenta con un parque natural en su interior con más de 12.000 plantas, con un teatro acuático al aire libre con una piscina para saltos acrobáticos o bien con dos simuladores para hacer surf.
También dispone de una cancha de baloncesto, de un campo de minigolf, de una amplia zona de paseo, de un cine en 3D, de una pista de patinaje sobre hielo y ofrece tiendas y restaurantes de todo tipo. Construido en Finlandia, en un barco de estas características todo son cifras mareantes, como los 18.700 botellas y latas de cerveza o los 86.400 huevos que se consumen en una semana.
Precisamente este domingo, los comercios de Barcelona están autorizados a abrir en horario completo para aprovechar la llegada de toda esta afluencia de turistas alojados en 14 cruceros.
Se trata del último día de apertura autorizado este año para los comercios como fruto del acuerdo entre el ayuntamiento de la ciudad y el sector. Un barco gemelo al Oasis of the Seas, el Allure of the Seas, hará una temporada completa en el Mediterráneo en 2015 y usará Barcelona como base.