Una cuarta borrasca para el fin de semana pone en jaque a la cuenca del Ebro

Publicidad

previsiones de aumento del nivel hídrico

Unos 600 agentes de la UME y fuerzas de seguridad trabajan en la contención del Ebro

Los habitantes de los municipios de la Ribera Alta del Ebro viven con preocupación las horas previas a la punta de la crecida extraordinaria del río, al que no dejan de mirar de reojo, aunque al menos con la tranquilidad que da ver que las medidas de protección han llegado a tiempo.

Un efectivo de 600 soldados y agentes de la Unidad Militar de Emergencias, de la Guardia Civil y de la Policía Nacional forman el dispositivo de seguridad y prevención que el Gobierno ha desplegado en Aragón ante la previsión de una crecida extraordinaria del río Ebro.

Los efectivos se encuentran coordinados desde este jueves para hacer frente a las previsiones de aumento del nivel hídrico, informa la Delegación del Gobierno en la comunidad autónoma. Se trata de una avenida extraordinaria del Ebro similar a la que causó destacadas inundaciones y daños en 2015 y en 2003. Aunque el caudal máximo del Ebro en Castejón se ha registrado a las 10.00 horas, unos 2.682 metros cúbicos/segundo, la tendencia, por ahora, es descendente, apunta la Delegación con datos de la Confederación Hidrológica del Ebro (CHE).

Informa, además, que el caudal de salida actual en Yesa es de 50 metros cúbicos/segundo y de unos 150 en Itoiz, unas cifras que revelan la reducción en la que se ha trabajado mediante la laminación de sendos embalses. Tanto el Ejecutivo central como el aragonés, al igual que las alcaldías de los municipios afectados, están trabajando intensamente en las últimas horas debido a la evolución del nivel de agua del Ebro tras el paso de la punta por Castejón y Tudela, en Navarra.

No se ha decidido aún la evacuación de los residentes en las zonas en riesgo de quedar anegadas, sobre todo en Pradilla y en Boquiñeni, pero es un extremo que no se descarta. Señala la Delegación del Gobierno que la unidad BIEM IV de la UME se activó ayer en la comarca de la Ribera Alta. Cuenta con el apoyo de dos helicópteros que siguen la evolución del río desde Castejón hasta Pastriz. Asimismo, también ayer, una sección del Batallón (Sección de Zapadores) llevó a cabo una serie de trabajos de contención, al igual que en Cabañas de Ebro.

Entre sus cometidos, labores de vigilancia de las motas para evitar filtraciones. La Delegación del Gobierno explica que hoy una sección de Intervención y un equipo de máquinas, en Novillas, continúan los trabajos de contención y refuerzo de las motas. Al mismo tiempo, la Policía Militar está haciendo labores de reconocimiento y seguridad en la zona. Hasta 200 militares ha desplegado la UME entre las jornadas de ayer y hoy, así como 60 vehículos y los citados dos helicópteros.

En su nota de prensa, la Delegación del Gobierno añade que la Guardia Civil ha movilizado efectivos de Tráfico, del Grupo de Reserva y de Seguridad, de Seguridad Ciudadana y de Actividades Subacuáticas o aéreas, entre otras. Y la Policía Nacional ha destinado agentes de Seguridad Ciudadana y de la Unidad de Intervención Policial, además del servicio de helicóptero.

Publicidad