Siria celebrará elecciones parlamentarias a finales de año

El ministro de Exteriores de Siria, Walid al Moallem, informó este sábado de la celebración a finales de año de elecciones parlamentarias como primera medida de aplicación del programa de reformas anunciado por el presidente Bashar Al Assad el pasado mes de junio para satisfacer las exigencias de la población y cesar la violentísima represión de las fuerzas de seguridad. 
Así lo hizo saber Al Moallem a un grupo de embajadores árabes en un encuentro celebrado en Damasco, donde ratificó la voluntad del Gobierno sirio a la hora de concretar el programa de reformas anunciado el pasado 6 de junio por Al Assad. 

"Las autoridades sirias mantienen que el diálogo nacional es el camino para resolver la crisis actual, y en ausencia de tal diálogo por la constante negativa de la oposición, no tenemos otro remedio más que abordar el camino de las reformas", explicó el ministro en declaraciones recogidas por la agencia oficial de noticias siria, Sana.

En este sentido, Al Moallem garantizó que las elecciones serán "libres y justas" y desembocarán en la creación de una asamblea popular "que represente al pueblo sirio a través del pluralismo garantizado por la ley de partidos y las numerosas salvaguardas proporcionadas por la ley electoral".

Este anuncio tiene lugar después de que Estados Unidos emplazara a sus ciudadanos en Siria a abandonar de inmediato este país o limitar sus desplazamientos dentro del territorio. El Departamento de Estado justifica su llamamiento por la "actual incertidumbre y volatilidad" en el país árabe, razón por la que urge a abandonarlo mientras se siga disponiendo de medios de transporte para ello.

Los medios hablan de no menos de nueve civiles muertos este viernes --primero desde el inicio del Ramadán-- en el marco de las manifestaciones contra el régimen de al Assad, cuya represión ha sido objeto de condena en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. Estos últimos días los tanques del Ejército se han empleado a fondo en el centro de Hama, donde desde el domingo se calcula que han fallecido 300 personas.