Crimen brutal

Un menor de 13 años mata a su compañero de clase, lo descuartiza y se come el cadáver: "Sabía a pollo empanado"

El joven esparció los restos de su compañero hasta en cuatro lugares diferentes. Confesó copiar escenas violentas de películas y videojuegos.

Luces encendidas de un coche de policía

Luces encendidas de un coche de policía Pexels

Publicidad

Aprovechando que sus padres no estaban en su casa, Youssef, un adolescente de 13 años llevó a su compañero de clase Mohamed AM. Con un palo de madera lo golpeó en varias ocasiones en la cabeza provocando su muerte. Tras esto, con una sierra eléctrica, lo cortó en trozos pequeños que posteriormente metió en su mochila. Lo más macabro es que se comió algunos de ellos "por curiosidad", según el medio británico 'The Sun'.

Con las partes del cuerpo del compañero a sus espaldas comenzó a esparcirlos por la ciudad egipcia de Ismailia: en las inmediaciones de una piscina, en un puente, en un campo abierta y cerca del centro comercial. Las autoridades fueron avisadas tras encontrar los restos de este último.

El joven de 13 años confesó ante la policía reconoció que estaba copiando las escenas violentas de películas y juegos que consumía. Cuando confesó el brutal crimen afirmó a las autoridades que las partes del cuerpo sabían a "pollo empanado". También reconoció haberlo desmembrado con la sierra de su padre, de profesión carpintero, y repartir los trozos por la ciudad. Al cadáver se le practicó la autopsia que confirmó los hechos.

Una vez detenido recreó el crimen llevando a los policías por todos los lugares donde había arrojado las partes. Tras esto fue trasladado al Ministerio Público donde estuvo cuatro días para después enviarlo en un centro de menores durante una semana, según el medio inglés.

El menor fue sometido a una evaluación psicológica completa, así como a una prueba de drogas y análisis forenses donde compararon sus muestras con las de la víctima. Aún continúan investigando el contenido que consumía Youssef para entender que pudo inspirarle a cometer tal acto.

Se lo decían "las voces"

Mató, descuartizó y profanó el cadáver de su madre. Es el brutal crimen que cometió Alberto S.G, más conocido como el 'canibal de Ventas', entre enero y febrero de 2019. Fue condenado a 15 años de prisión, sin embargo en enero de este año solicitó su ingreso en un centro psiquiátrico. Dos meses después le concedieron la petición.

La carta remitida a su abogado, el preso denunciaba que no le valoraron psicológicamente y que no leyeron sus derechos durante el arresto. "Sufrí una enajenación mental transitoria motivada por el consumo de cannabis y no vivía la realidad tal y como es, sino que deliraba y tenía psicosis y paranoia", escribe en el documento.

En este asegura que el fatal desenlace de su madre fue porque se lo dijeron "las voces": "Acabé haciéndole a mi madre lo que me decían las voces y lo que veía en mis alucinaciones visuales". Por su parte, el letrado Julen Martínez, de Valmaseda abogados, alegó las peticiones de su cliente para ser trasladado a un centro psiquiátrico al no querer "salir a la calle, sabe que es un peligro para la sociedad".

Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y no te pierdas la última hora y toda la actualidad en nuestro perfil de Google.

Publicidad