Jody Kossow, la mujer que mató a su hijo alegando que la perseguía Satanás

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POR PROBLEMAS MENTALES

Declaran 'no culpable' a una mujer que mató a su hijo de 55 puñaladas: "Satanás me perseguía"

"Acabo de matar a mi hijo. Satanás venía detrás de mí. Oh, Dios. Satanás me perseguía", señalaba la mujer en la llamada a emergencias de aquel fatídico día.

Una madre de Illinois que culpó a Satanás después haber apuñalado a su hijo de ocho años, ha sido declarada 'no culpable' por razones mentales. El hijo de Jody Kossow, Thomas, fue encontrado con 55 puñaladas porque su madre lo atacó creyendo que el diablo la estaba persiguiendo. En la grabación de su llamada telefónica a un operador emergencias que se ha escuchado en el juicio se puede oír el testimonio de la mujer: "Acabo de matar a mi hijo. Satanás venía detrás de mí. Oh Dios. Satanás me perseguía". A pesar de la confesión, Kossow ha sido considerada inocente debido a su estado de salud mental.

Le había preguntado a su madre si podían salir a ver las estrellas

El asesinato tuvo lugar la noche del 10 de septiembre de 2013, cuando el entonces marido de Kossow, Michael y su hija estaban dormidos. Thomas, que tenía problemas para dormir, le había preguntado a su madre si podían salir y mirar las estrellas. Poco después, según se dijo en el juicio, ella cogió un cuchillo de la cocina y lo apuñaló más de 55 veces. Su garganta recibió siete cortes, y sus pulmones y su corazón fueron apuñalados repetidamente. Además, sus manos y brazos tenían heridas defensivas.

Sin embargo, según recoge 'Daily Mail', Marilyn Hite Ross, jefe de la oficina criminal de la oficina del fiscal del estado del condado de Winnebago, ha señalado que los informes de los psiquiatras llegaron dos años después del asesinato y no explican por qué Kossow parecía lúcida y controlada cuando llegó la policía y que la mujer no había tenido ningún diagnóstico previo de salud mental.

A pesar de haber sido declarada 'no culpable', Kassow será internada en un hospital psiquiátrico hasta que se considere que no es una amenaza para la sociedad. Si hubiera sido considerada culpable, pero mentalmente enferma, habría significado que habría ido a prisión para cumplir una sentencia durante la cual se le da medicamentos y ayuda para la salud mental.

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