Capitán del crucero Costa Concordia

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TRAS EL NAUFRAGIO DEL CRUCERO

Confirman el arresto domiciliario para el capitán del Costa Concordia

El Tribunal Supremo italiano decidió hoy que el capitán del crucero "Costa Concordia", Francesco Schettino, permanezca bajo arresto domiciliario a la espera de que concluyan las investigaciones sobre el naufragio de la nave el pasado 13 de enero.

El Tribunal Supremo italiano decidió hoy que el capitán del crucero "Costa Concordia", Francesco Schettino, permanezca bajo arresto domiciliario a la espera de que concluyan las investigaciones sobre el naufragio de la nave el pasado 13 de enero.

El Supremo rechazó así tanto la petición de la Fiscalía de Grosseto, que solicitaba la medida de prisión cautelar, como la de la defensa del capitán, que pedía su puesta en libertad, informaron los medios de comunicación italianos.

Con su decisión, el Supremo ha confirmado la sentencia de un Tribunal de Florencia de principios de febrero y la de la jueza de instrucción Valeria Montesarchio, del 17 de enero, que dictaminaron el arresto domiciliario de Schettino al considerar que no existía peligro de fuga por parte del capitán.

Algo con lo que no está de acuerdo la Fiscalía de Grosseto, que conduce las investigaciones sobre el accidente y que siempre ha reiterado su petición de prisión cautelar, ya que sostiene que ese riesgo de fuga existe, así como el de manipulación de pruebas por parte del capitán del "Costa Concordia".

Schettino está acusado de homicidio culposo múltiple, abandono de nave, naufragio y de no haber informado inmediatamente a las autoridades portuarias de la colisión contra un escollo que provocó el naufragio del buque el pasado 13 de enero.

El crucero "Costa Concordia", en el que viajaban 4.229 personas, de ellas 3.209 pasajeros, encalló frente a las costas de la isla del Giglio, en el mar Tirreno, después de que Schettino decidiese, supuestamente sin autorización, acercarse a la costa de la isla y en esta maniobra impactó contra un escollo, lo que provocó la rotura del casco. La nave encalló posteriormente frente a la costa de la isla y se inclinó unos 80 grados.

Por el momento, las víctimas mortales del naufragio son 30, entre ellas un español y dos peruanos. A mediados de febrero, la Fiscalía amplió a nueve el número de investigados por el naufragio, con la inclusión de siete nueve personas en el registro de los indagados, entre ellos tres responsables de la naviera propietaria del buque, Costa Cruceros.

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