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Supervivientes y familiares de las víctimas de la Masacre de Orlando demandan al Departamento de Policía y al club Pulse

Dos años después del tiroteo de la discoteca Pulse de Orlando, en Florida, algunos de los supervivientes y familiares de las víctimas han presentado una demanda. Denuncian que los agentes deberían haber actuado de forma más agresiva para detener al tirador y que el local no contaba con la seguridad adecuada. El 12 de junio de 2016, un terrorista irrumpía en la discoteca Pulse y tras jurar lealtad a Estado Islámico, comenzaba a disparar de forma indiscriminada.

Los supervivientes y familiares de las víctimas conmemoran el segundo aniversario del tiroteo en el club nocturno Pulse con una ceremonia de recordación, una carrera, exhibiciones de arte y litigios. Pero a escasas horas de la conmemoración, algunos de ellos han demandado al Departamento de Policía de Orlando y a los dueños del club nocturno.

La demanda federal contra la policía y la ciudad de Orlando afirma que los agentes de policía deberían haber actuado de forma más agresiva para detener al tirador. Mientras, la demanda estatal contra los propietarios de Pulse, Barbara y Rosario Poma fue expresa que el club nocturno no contaba con la seguridad adecuada.

El Departamento de Policía de Orlando ya ha declarado todos sus agentes hicieron todo lo posible para salvar la mayor cantidad de vidas posible. Las directoras del club, en cambio, han anunciado un comunicado que no han visto la demanda y que el enfoque de esta semana debería ser la conmemoración

La masacre de la discoteca Pulse de Orlando, dejó 50 personas asesinadas y otras 53 heridas. El ataque, es el segundo tiroteo con mayor número de muertes en la historia de Estados Unidos. El ataque supuso el segundo tiroteo con mayor número de muertes en la historia de Estados Unidos y, fundamentalmente, el más violento y mortal contra la comunidad LGTB en el país. Aunque poco después el FBI anunciaba que no había motivos para creer que la matanza estuviera motivada por la homofobia.

El autor del atentado, Omar Mir Seddique Mateen, falleció también al ser abatido por la policía después de un intenso tiroteo.

En Estados Unidos mueren al año cerca de 33.000 personas por armas de fuego y en numerosos estados se puede adquirir un rifle de asalto de manera legal por el importe de un móvil.

En un país en el que la posesión de un arma está legalmente amparada, cada vez que tiene lugar una masacre, se escuchan con más fuerza las voces que reclaman un mayor control en el acceso a su compra. Sin embargo, el “lobby” de las armas, sigue teniendo una gran influencia en Estados Unidos.

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