Los videntes que han adivinado alguna vez el número de la Lotería de Navidad

El Sorteo Extraordinario de Navidad se celebra el próximo 22 de diciembre en el Teatro Real de Madrid en una mañana cargada de ilusión donde muchos sueñan con cantar el gordo de navidad. El requisito indispensable para participar en la lotería de navidad 2021 es comprar un décimo de lotería, que tiene un precio de 20 euros. Como en todos los juegos donde el azar es el único responsable del destino, son multitud de videntes los que aparecen a lo largo del año creyendo tener la combinación acertada para el gordo de navidad.

Videntes que 'adivinan' el número del gordo de navidad

En el año 2002, el vidente Anthony Blake escribió en un programa de Antena 3 la combinación de números ganadora de la Lotería de Navidad de ese año en la primera página de su libro. Lo que hizo con este libro fue guardarlo bajo llave en un centro comercial de Madrid que estuvo, además, custodiado por vigilantes hasta el día del sorteo de navidad.

El mismo 22 de diciembre, la caja en la que estaba el libro se llevó hasta Antena 3 de nuevo y, una vez que los niños de San Ildefonsocantaron el gordo de navidad, se desveló en directo que el número que el número que Anthony Blake había escrito en la primera hora del libro era el que se acababa de anunciar en el Teatro Real de Madrid como premio gordo de la navidad.

La vidente gallega Elsa Altagracia se hizo muy conocida en el año 2017 cuando ganó dos segundos premios de la Lotería de Navidad y es una de las predicciones más destacada.

Unos años más tarde, en 2009, el Mago Xerax hizo algo parecido, aunque los espectadores que lo vieron por televisión no terminaron de creerle del todo. Al parecer, Xerax también escribió en un papel el número que ganaría el sorteo de la Lotería de Navidad ese año y después lo guardó hasta el 22 de diciembre en una urna. El día del sorteo de navidad, la urna se abrió y se vio como el número coincidía con el del gordo de navidad. Sin embargo, algunos espectadores declararon ver al mago realizar movimientos extraños en el momento en el que se abrió la urna.