El conseller de Interior de la Generalitat y secretario general de UDC, Ramon Espadaler, ha rechazado celebrar la consulta que el Govern prevé convocar para el 9 de noviembre si el Tribunal Constitucional la suspende: "Saltarse la legalidad no lleva a ningún sitio".
"Saltarse la legalidad española no está en la base" del acuerdo de los partidos favorables a la consulta, ha resaltado en una entrevista, en la que ha defendido que amparar la consulta en el marco legal aporta legitimidad al proceso y lo potencia internacionalmente.
"Me parece una temeridad presuponer, como se presupone, y un atentado al Estado de derecho y a la división de poderes" que el Gobierno central dé por hecho que el TC suspenderá la consulta, ha dicho, y ha criticado que éste no es un consejo que deba darse desde el Govern.
"Lo que tenemos ahora es un texto legal que el Consell de Garanties Estatutàries dice que se adecua a la legalidad y que está apoyado por una mayoría de los partidos del Parlament", ha destacado.
El conseller ha resaltado que "la fortaleza del proceso es que fuerzas tan diferentes, tan distantes, hayan buscado un denominador común" para lograr celebrar la consulta el 9 de noviembre. Ha puntualizado que la unidad política no consiste en poner al presidente de la Generalitat, Artur Mas, "en manos del resto de partidos, sino poner al resto de partidos al lado de Mas".
Ha resaltado que UDC está "radicalmente a favor de hacer la consulta y superar el Estado autonómico, que ya no da más de sí", y ha insistido en que la formación decidirá su voto a la segunda pregunta una vez el presidente de la Generalitat convoque formalmente la consulta.
Espadaler ha insistido en que defiende un modelo confederal pero que hay pluralidad de opiniones en UDC, ya que algunos apuestan por construir este modelo a partir de una reforma de la Constitución y otros defienden hacerlo después de que Cataluña asuma la independencia.