La supervisión al imán de Ripoll se suspendió a mitad de condena porque no se observaron evidencias de su radicalización

Abdelbaki Es Satty, el imán de Ripoll, podría ser una pieza determinante en la creación del grupo que cometió la masacre en Cataluña. Los familiares de los jóvenes yihadistas no dudan en señalarle como el hombre que les animó a cometer la matanza.

Es Satty tiene 40 años y predicaba en la mezquita del pueblo desde mediados de 2016. Según los vecinos, contó que se iba a Marruecos, pero los Mossos creen que su destino era el chalet de Alcanar. Los agentes registraron su vivienda durante la jornada del sábado para ver si coinciden con los restos encontrados en los escombros.

Las investigaciones apuntan a que el imán podría haber sido el encargado de reclutar y radicalizar a los terroristas. Según los familiares de quienes cometieron el atentado, fue él quien se había encargado de reclutar y radicalizar a los terroristas.

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