Las grandes empresas españolas triunfan a nivel internacional

Es tecnología punta desarrollada aquí, por empresas patrias, pero que fuera llevan años innovando en el sector energético. En Valencia, seis años y noventa mil metros cúbicos de hormigón después, con su reforma la central de La Muela dará electricidad a medio millón de hogares. El Príncipe Felipe acaba de inaugurar esa central hidroeléctrica.

También a dos mil kilómetros de Madrid bajo el mar triunfan las empresas españolas. En la costa oeste de Escocia aprovechan las mareas más fuertes de Europa con un parque de hélices submarinas. A cien metros de profundidad han llevado la turbina más potente del mundo y una parte, de Iberdrola, tiene firma española.

Fuera del agua, sobre la arena del Estado de Arizona, en Estados Unidos. Era el paraje ideal para levantar una planta termosolar de 1.500 millones de euros tan grande como mil campos de fútbol. Diseñada, construida y ahora gestionada por una empresa de aquí, Abengoa.

No son casos aislados. Cada vez más países confían en nuestras firmas. El primer proyecto de AVE de Arabia Saudí hablará nuestro idioma. Talgo tiene el encargo de fabricar treinta y cinco trenes.

Somos líderes en gestión de transporte. El control aeroportuario de uno de cada tres aviones en el mundo se hace con sistemas españoles.

Y otro caso más: la compañia que está reformando la terminal 2 del aeropuerto de Heathrow, en Londres, con un contrato de 900 millones de euros es también, ya lo han adivinado, española. Su nombre: BAA (Ferrovial).