No era un barquito de cáscara de nuez. Era de papel, el más grande de España. Y además ha navegado. Lo han construído esta mañana a orillas del rio Manzanares, en Madrid. Han utilizado, para ello, 50 metros cuadrados del mismo material que se emplea para los tetrabriks.
Y la forma de construirlo, totalmente tradicional. Dos 'aventureros' han sido los primeros pasajeros de esta curiosa embarcación que ha navegado por el río. El trayecto, eso sí, ha sido muy corto por razonas obvias: después de 20 minutos, el barco corría peligro de hundirse.