Es el momento en el que los operarios de la funeraria proceden a retirar el cadáver de Rosario, la mujer de 86 años a la que presuntamente su hijo le quitaba la vida en este barrio del Secadero. Una muerte violenta en la que el hombre utilizó un hacha según fuentes policiales. Esta mañana la casa amanecía precintada. Los vecinos no se explican lo sucedido.
Durante varias horas los agentes estuvieron inspeccionando el interior de la vivienda, después de que el hombre confesara el crimen. Porque él quien se entregó a la policía.
La mujer llevaba 5 años separada. En esta casa vivía ella con su hijo Domingo, de 48 años, el mayor de tres hermanos. Dicen de él que es una persona solitaria y discreta.
Según fuentes de la investigación el hombre puede padecer un trastorno psiquiatrico. En las próximas horas tendrá que declarar ante el juez.
