Un testigo grabó con su cámara como los bomberos tuvieron que esmerarse mucho para sacar a la víctima de su coche, quedó atrapado entre los amasijos de hierro y es que motor quedó empotrado en el volante.
El hombre de unos 50 años fue trasladado al hospital tras recibir una primera atención in situ. No peligra su vida, pero su estado es grave.