Lo ha confirmado esta mañana el propio BCE a través de su cuenta de twitter. Comienza así la esperada adquisición de bonos soberanos, 60.000 millones de euros mensuales de los que un 15% será para la compra de deuda española y que ya ha tenido efectos en los mercados. Sin duda, el más relevante la depreciación del euro.
Que el euro vea caer su cotización supone que, a los que pagan con dólares, les salga cada vez más barato comprar nuestros productos. Es decir, un euro débil hace que los paises de la eurozona sean más competitivos internacionalmente y eso tiene sus ventajas, sobre todo en materia de exportaciones y en ingresos por turismo.
"una empresa que ganaba un 5%, si dolar se mantiene así, puede ganar un 10%" asegura Ofelia Marín-Lozano, profesota de ICADE. Además un euro barato convierte a paises como España en un destino turístico aún más atractivo, y no solo para los americanos.
El pasado año los turistas extranjeros gastaron en nuestro país 63.000 millones de euros, una cifra record que -con la actual cotización de la moneda única- podría volver a superarse en 2015. La debilidad del euro, sin embargo, también tiene desventajas, ya que se encarecen las importaciones, especialmente de los carburantes que suponen el 20% de todo lo que compramos fuera de nuestras fronteras.
Los 15.000 millones de euros que pensábamos ahorrar cada año con el desplome del precio del petróleo, serán algo menos. Ahora bien, si comprar en el extranjero sale ahora más caro que antes, eso puede hacer que los españoles apostemos por adquirir más productos de fabricación propia.
