Publicidad

EL 80 % DE LOS PAÍSES EUROPEOS LO TIENE INSTAURADO

¿Cómo se aplica el copago sanitario en Europa?

En la actualidad no existe una directiva europea que regule las fórmulas de copago pero, a excepción de Reino Unido, la mayoría de los países han establecido una tasa para las visitas al médico de cabecera y otra para las hospitalizaciones.

La fórmula de copago es nueva en España pero no en el resto de Europa. La mayoría de los países europeos ya han establecido límites en el sistema de Seguridad Social gratuito para evitar los abusos.

Muchos ciudadanos optan por el seguro privado

Solo Reino Unido mantiene un sistema similar al español. Las visitas al médico, las pruebas y los ingresos hospitalarios no tienen coste extra.

La diferencia reside en los medicamentos. Los facultativos entregan a los pacientes la dosis de fármacos que necesitan, una de las medidas que podría establecerse también en España. Si tienen que acudir a una farmacia, abonan parte del importe de los medicamentos.

Los franceses comenzaron a pagar por ir al médico en 2004. Hoy en día, acudir a una consulta les cuesta de media 23 euros, aunque la Seguridad Social les reembolsa dos tercios de ese dinero.

Además, deben abonar un euro por cada prueba o visita al especialista y 50 céntimos por las medicinas. En los hospitales, cada día de ingreso cuesta 18 euros. Los fármacos pueden estar subvencionados total o parcialmente.

El coste por ingreso oscila entre los 5 y los 18 euros al día

Esta fórmula ha llevado a los franceses a contratar de forma casi generalizada seguros privados que sufraguen los gastos que no cubre la sanidad pública.

También en Alemania funciona la fórmula del copago. Quienes ingresan  más de 400 euros al mes deben destinar una parte de su sueldo a un seguro médico obligatorio.

Los pacientes realizan un pago único trimestral de 10 euros que les permite acudir al médico de cabecera y a especialistas. En caso de hospitalización, abonan 10 euros por día, con un tope cercano a los 300 euros anuales.

Los portugueses pagan la llamada tasa moderadora. Una urgencia hospitalaria cuesta 8 euros. Cada día de ingreso supone 5 euros aunque están exentoslos enfermos crónicos, las embarazadas, los desempleados y quienes cobran pensiones mínimas.

En el lado contrario se encuentra Holanda, donde cada ciudadano debe tener sus seguro privado.

Publicidad