Teresa, la cuidadora asesinada en O Porriño, acababa de denunciar acoso: "Le hemos fallado"

Un crimen brutal ha sobrecogido a todo el ayuntamiento de O Porriño, en Pontevedra. Teresa, vecina de la localidad cercana de Mos, visitó, como hacía habitualmente, el domicilio en el que vivía un matrimonio de septuagenarios que necesitaban atención. En concreto, Teresa se ocupaba de los cuidados de la mujer, que tras haber sufrido un ictus, precisaba ayuda con las tareas básicas del día a día.

La sorpresa saltaba a mediodía de este martes cuando, presuntamente, el marido de la usuaria del servicio atacó a Teresa con un hacha acabando con su vida. Cuando llegaron los servicios de emergencia ya no pudieron hacer nada por salvarla, y se encontraron al hombre desorientado, hablando de manera inconexa y manchado de sangre. Así lo confirmaba Abel Losada, subdelegado del gobierno en Pontevedra, pocas horas después del terrible suceso.

Sobre el terreno, consternación total. El presunto asesino fue trasladado al Hospital Álvaro Cunqueiro, en Vigo, para una valoración psiquiátrica. El hombre ya había precisado atención sanitaria en relación a problemas derivados de posibles enfermedades mentales y, según ha trascendido, la propia familia quería que fuera ingresado. Ahora permanecerá en el hospital hasta que pase a disposición judicial en las próximas horas para determinar su futuro.

“Le hemos fallado a Teresa”

La conmoción se hizo aún más intensa en relación a este dramático incidente, al saberse que Teresa había denunciado con anterioridad haber sufrido acoso en esta vivienda. Incluso había expresado, apenas un día antes de la tragedia, su deseo de no regresar a ese domicilio. Así lo han denunciado desde el sindicato nacionalista CIG.

Esta misma mañana, en una concentración a las puertas del ayuntamiento de O Porriño, Mercedes, la delegada de la CIG que recibió la denuncia de Teresa, confirmaba muy emocionada, que: “Le hemos fallado, yo le he fallado a Teresa”.

Explica esta sindicalista que es una situación que las mujeres que se dedican al Servizo de Axuda no Fogar (Servicio de Ayuda en el Hogar) sufren a diario. “Todas las semanas hay mujeres que denuncian acoso o maltrato en las casas de los señores que cuidan. Las empresas, ésta y las demás, no hacen nada. Les dicen que vuelvan al día siguiente o mandan a otra en su lugar”.

Los servicios de ayuda en el hogar dependen de los ayuntamientos, son servicios necesarios para atender en sus domicilios a personas dependientes que viven solas o matrimonios mayores, como este caso, que no son capaces de valerse por sí mismos. Dependen de los municipios pero son gestionados a través de empresas privadas. En este caso, la responsable en el ayuntamiento de O Porriño, no ha hecho declaraciones al respecto.

”Un antes y un después para cambiar la legislación”

Desde las organizaciones sindicales, mantienen que no es un caso aislado si no que son situaciones repetidas y aseguran que quieren que este hecho dramático sea: “Un antes y un después para cambiar la legislación para las mujeres que se dedican a los cuidados y al SAF”.

Alejandro Lorenzo, alcalde de O Porriño, por su parte, además de condenar por supuesto los hechos. Ha expresado su confianza plena en la justicia y ha asegurado que el ayuntamiento se va a personar en la causa. “Vamos a actuar con contundencia”, ha dicho el regidor. Asegura que desconocían denuncia alguna pero que una vez se resuelva la investigación actuarán en consecuencia.

También ha confirmado el alcalde que la mujer del presunto asesino, la mujer de la que Teresa se encargaba, está recibiendo la atención necesaria y se está tramitando ya, por vía de urgencia, una residencia para ella.

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