La crecida del río Ebro a su paso por Miranda de Ebro, donde alcanza un caudal de 1.200 metros por segundo, ha provocado inundaciones en esta localidad, aunque también en la comarca de Merindades se han desbordado los ríos Cadagua, Nela y Trueba, lo que ha puesto en alerta a la provincia.
El delegado territorial de la Junta de Castilla y León en Burgos, Baudilio Fernández-Mardomingo, ha activado la situación de emergencia 1 -en una horquilla de cero a tres- del Plan de Protección ante Riesgo por Inundaciones (Inuncyl), ante el previsible aumento de las crecidas por las lluvias y el rápido deshielo.
El delegado territorial está en contacto con la Agencia de Protección Civil, así como el resto de administraciones, para coordinar todas las actuaciones que se están llevando a cabo. Fuentes municipales de Miranda de Ebro han precisado que en esta localidad, el río Ebro ha superado los 6,30 metros de altura, un nivel que no alcanzaba desde hace años.
Aunque la Confederación Hidrográfica del Ebro afirma que la crecida aún no ha llegado a su punto máximo, en este momento el agua ha anegado ya la parte baja de la ciudad.
Edificios como la antigua Comisaría, el centro de salud o la Casa de Cultura están rodeados por el agua, lo que ha obligado a la Policía y a la Agrupación de Voluntarios de Protección Civil a cerrar al tráfico numerosas vías y a disponer diques con sacos.
También se presta atención a las crecidas de los ríos Bayas y Zadorra, cuyos caudales también presentan niveles anormalmente elevados. El Ebro también presenta niveles altos a su paso por el Valle de Tobalina, donde se ha desbordado en varios puntos y ha afectado a algunas instalaciones y urbanizaciones.
Otras localidades de la comarca de las Merindades, como Medina de Pomar, Villarcayo o Espinosa de los Monteros, se han visto afectadas por el desbordamiento de los ríos Nela y Trueba.
Además, el río Cadagua también presenta un caudal notable y se ha desbordado en varios puntos en el Valle de Mena. Más de una decena de tramos de carreteras provinciales y autonómicas están cortadas al tráfico en el norte de la provincia, además de la N-629 a su paso por Trespaderne.