Bola de fuego

Una gran bola de fuego cruza España a 61.000 kilómetros por hora

El fenómeno se produjo sobre las 22:10 horas del viernes y fue vista por numerosas personas a lo largo de todo el país. También, esta bola de fuego ha sido registrada por los detectores del proyecto SMART.

Una gran bola de fuego cruza Madrid a 59.000 kilómetros por horaProyecto SMART

Una impresionante bola de fuego ha cruzado España en la noche del viernes 16 de abril. El fenómeno se ha producido cuando una roca procedente de un asteroide ha impactado contra la atmósfera terrestre a una velocidad de 61.000 kilómetros por hora. En esta ocasión, dada la hora, muchas personas han sido testigos de este evento y han compartido sus impresiones en redes sociales.

Este bólido ha destacado por su larga duración, ya que ha tardado casi un minuto en desintegrarse, y estos fenómenos apenas suelen durar unos segundos. La bola de fuego también ha sido registrada por los detectores del proyecto SMART desde las estaciones de Sevilla, La Sagra (Granada), Calar Alto (Almería) y La Hita (Toledo). Además de por la estación de detección ubicada en Madrid (operada por Jaime Izquierdo en la Universidad Complutense de Madrid).

Esta bola de fuego se originó cuando una roca procedente de un asteroide entró en la atmósfera terrestre a una velocidad de 61.000 kilómetros por hora, esa velocidad hizo que se volviera incandescente y se generó a 85 kilómetros de altitud sobre Lugo. Después siguió su trayectoria hacia el suroeste con una dirección ligeramente descendente hasta llegar al suroeste de la Comunidad de Madrid. En ese momento, el bólido comenzó a ganar altura y se extinguió cuando se encontraba a una altitud de unos 87 km sobre el mar Mediterráneo, frente a la costa de Almería, momento en el que también salió por la atmósfera.

Según explica el astrofísico José María Madiedo, del Instituto de Astrofísica de Andalucía IAA-CSIC, una bola de fuego se produce cuando una roca impacta en la atmósfera de forma casi tangencial, siguiendo una trayectoria casi paralela al suelo. Aunque el suceso ha sido muy comentado por su duración, desde el IAA-CSIC también explican que, según los primeros cálculos y estudios, en este caso, el bólido no se destruyó completamente sino que volvió a salir de la atmósfera siguiendo su ruta por el espacio con una órbita modificada.

En apenas unas semanas, varios bólidos han sobrevolado la Península Ibérica. El último, a finales de marzo, destacó por su velocidad ya que cruzó el cielo de Castilla-La Mancha y Andalucía a 96.000 kilómetros por hora.