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EN BARCELONA

Detenida una banda que asaltaba establecimientos en centros comerciales

Los Mossos de Esquadra han detenido a este grupo que había robado en ocho establecimientos diferentes en tres meses en el área metropolitana de Barcelona. Habían robado en diferentes centros comerciales por el método del empotramiento. Como se ve en las imágenes golpean con fuerza y en varias ocasiones con un coche los cierres metálicos de las tiendas hasta que los rompen y consiguen entrar.

Los Mossos d'Esquadra han desarticulado un grupo criminal integrado por cinco hombres, que fueron detenidos el pasado 19 de enero, acusados de ser los presuntos autores de doce robos a tiendas de centros comerciales en el área de Barcelona, que llevaban a cabo empotrando un vehículo contra alguno de los accesos.

En un comunicado, la policía catalana ha informado hoy de que los cinco miembros del grupo, con edades entre los 20 y 66 años, eran especialistas en este tipo de robos que realizaron en doce tiendas de telefonía, ropa de marcas, perfumería e incluso una joyería.

En algunos de estos robos llegaron a llevarse relojes de lujo con un valor superior a los 50.000 euros, además de productos de telefonía con un valor de hasta 35.000 euros.

Los Mossos iniciaron la investigación en el mes de abril de 2017 a raíz de un robo en una empresa de conservas en Llinars del Vallès (Barcelona) en el que tres hombres forzaron la puerta y se llevaron una caja fuerte que contenía dinero en efectivo y joyas.

Días más tarde, agentes de la policía catalana encontraron una furgoneta calcinada que contenía la caja sustraída.

Los investigadores determinaron que estos tres hombres formaban parte de un grupo mayor que estaría implicado en otros once robos en los que siempre actuaban del mismo modo.

Los días previos al robo siempre sustraían un vehículo que después empotraban contra uno de los accesos a la tienda de un centro comercial del área metropolitana de Barcelona.

Tras sustraer los productos de valor del establecimiento, en alguna ocasión abandonaba el vehículo en el lugar y en otras lo usaban para huir.

Los cinco miembros estaban organizados de modo que cada uno realizaba una tarea diferente en cada fase del delito y eso les permitía introducir, a las pocas horas, los productos robados en el mercado negro.

El grupo fue desarticulado el pasado 19 de enero cuando agentes de la policía catalana entraron en los cinco domicilios de los detenidos en la ciudad de Barcelona y en Sant Adrià de Besòs (Barcelona).

En los registros que realizaron, los mossos encontraron una gran cantidad de objetos de tiendas robadas así como indicios que relacionaron directamente al grupo con otros nueve robos de mercaderías de camiones estacionado en áreas de servicio.

Los cinco detenidos pasaron a disposición judicial el pasado 22 de enero y el juez decretó para dos de ellos el ingreso en prisión y, para el resto, libertad con cargos.

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