La crisis se cuela en las vacaciones en España de los niños saharauis

Un grupo de niños saharauis ya han iniciado sus vacaciones en España, dentro del programa 'Vacaciones en Paz', en el que participarán 5.300 menores, aunque este año se han reducido el número de familias y de fondos que aportaban las administraciones para sufragar los gastos del viaje, debido a la crisis económica en la que está inmersa España.

316 niños llegarán este fin de semana a Madrid en el primer grupo de niños que comenzarán sus vacaciones con sus respectivas familias de acogida. El primer grupo está formado por 158 niños con edades comprendidas entre 7 y 12 años ha llegado a Madrid, donde comienza este año esta iniciativa, creada por las Asociaciones de apoyo al Sáhara, y esta noche lo hará otro grupo, con el mismo número de integrantes, también al aeropuerto de Barajas.

Durante los próximos quince días y hasta comienzos de julio, los vuelos de los niños y niñas saharauis irán llegando a distintas comunidades autónomas, donde permanecerán durante dos meses, ha explicado un portavoz del Frente Polisario en Madrid.

Para los menores saharauis es una oportunidad para salir del desierto en unos meses muy duros, los del verano, cuando las temperaturas superan diariamente los 50 grados. Gracias a 'Vacaciones en Paz', los menores completan su dieta con alimentos como verdura, pescado y carne, que no suelen ingerir en los Campamentos de Tinduf, donde viven. Además, se firman convenios con las administraciones de cada comunidad autónoma para pasar diferentes revisiones médicas y poder detectar si hay algún problema de salud, que suelen ser anemias o problemas estomacales.

Algunas organizaciones, como la Fundación Ruta de la Luz facilita revisiones ópticas y gafas, de manera gratuita, a todas las familias de acogida que lo deseen. Bajo el lema "Acoge una sonrisa", este programa se ha convertido en uno de los más arraigados en todo el Estado para ayudar a los afectados del conflicto saharaui, desde hace ya 37 años.

Desde que comenzó la crisis económica la cifra de familias de acogida ha disminuido y los recortes que han realizado las administraciones locales en cooperación han obligado a las asociaciones a realizar diversas iniciativas para que el programa haya podido salir adelante un año más, explican los organizadores.