En los Países Bajos, un grupo de familias ha denunciado al primer ministro Mark Rutte por negligencia en el llamado escándalo de las ayudas sociales.
El escandalo fue destapado por una abogada española. Este escandalo obligó a dimitir a todo el gobierno. Ahora culpan al primer ministro holandés, Rutte, de saber que se les acusaba de un falso fraude.
Hasta ochenta víctimas del escándalo de las ayudas a familias en Países Bajos presentaron este miércoles una denuncia contra el primer ministro, Mark Rutte, al que acusan de estar directamente involucrado en la toma de decisiones de la Agencia Tributaria desde al menos mayo de 2019.
Según, Vasco Groeneveld, el abogado de los este grupo de afectados, Mark Rutte estuvo al tanto del escándalo desde mayo de 2019, y participó en la toma de decisiones, acusando erróneamente a familiar de cometer un fraude por las ayudas recibidas para el cuidado de sus hijos, exigiéndoles devolver lo recibido.
El abogado Groeneveld acusa a Rutte de saber que Hacienda estaba "violando la ley y no cumplía con las reglas". Además, de sospechar que alguien cometía un fraude, debería haberle dado la oportunidad de demostrar que no era así.
"Rutte no intervino cuando mis clientes fueron perseguidos y robados oficialmente", dijo Groeneveld, que ya presentó una denuncia contra otros cinco funcionarios del Gobierno.
Los padres también denunciaron con este sucedo ante la Agencia Tributaria, aunque la Fiscalía se negó a abrir una investigación penal contra esta institución y sus empleados.
