Terremoto Japón

Así explicó Roberto Brasero la 'triple tragedia' en Japón: terremoto, tsunami y la crisis nuclear en Fukushima

El terremoto más potente sufrido en Japón se produjo hace hoy doce años. Terremoto al que le sucedió un tsunami y una crisis radioactiva en la central nuclear de Fukushima.

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El 11 de marzo de 2011, a las 14:46:23, hora local de un viernes, en la región de Tohoku, Japón, a 371 kilómetros al noroeste de Tokio, se produce un terremoto de magnitud 9.1.

El epicentro del terremoto se ubicó en el mar, frente a la costa de Honshu, y duró más de tres minutos, causando 15.899 muertos, 2.556 desaparecidos y unos 6.152 heridos. Edificios desplomados, carreteras destruidas y licuefacción de suelo, fueron algunos de los efectos del fuerte terremoto.

Horas después del terremoto se generó una alerta de tsunami para la costa pacífica de Japón y otros países, incluidos Nueva Zelanda, Australia, Rusia, Filipinas, Indonesia, Papúa Nueva Guinea, Taiwán, Estados Unidos, México, Canadá, y en Sudamérica, Colombia, Perú, Ecuador y Chile. El tsunami provocó grandes olas, y olas de nueve metros golpearon la costa norte de Japón, que dañaron varios reactores nucleares en el área. Además, el sismo desplazó la isla de Honshu 2,4 metros al este.

A causa de la falta de suministro eléctrico, falló el sistema de enfriamiento de algunos reactores nucleares de la planta nuclear de Fukushima, que días después del tsunami sufrió una explosión que produjo importantes liberaciones al ambiente de agentes radiactivos.

La crisis radioactiva de la planta de Fukushima duró meses, con niveles de radiación extremadamente altos. En diciembre del año 2011, el Gobierno de Japón informó de una "parada fría" en la central nuclear de Fukushima Daiichi, un hito simbólico que significó que los reactores paralizados de la planta se mantuvieron a temperaturas por debajo del punto de ebullición durante algún tiempo.

Los daños materiales causados por el terremoto y el tsunami posterior se estimaron en unos 300.000 millones de euros.

Esta triple tragedia, terremoto, tsunami y la grave crisis nuclear en la central de Fukushima, marcó definitivamente uno de los peores momentos en la historia de Japón.

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