El emperador de Japón, Akihito, ha recibido en audiencia al presidente del Gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero, en la segunda y última jornada de su primer viaje oficial al país nipón.
La audiencia, celebrada en el Palacio Imperial de Tokio, fue el último acto de Zapatero en la capital japonesa antes de viajar a Kioto, desde donde regresará a España.
Como establece el protocolo, la política y la economía no se mencionaron en la entrevista que mantuvieron Zapatero y Akihito, quien recordó que ha visitado España en cinco ocasiones.
Asimismo, el emperador pidió al presidente del Gobierno que transmitiera un caluroso saludo a los Reyes de España, según informaron fuentes de la delegación española.
Zapatero también traía los saludos de Don Juan Carlos y Doña Sofía, que realizaron su última visita de Estado a Japón en 2008.
El emperador Akihito quiso también trasladar a Zapatero su solidaridad y condolencias por la reciente muerte en Afganistán de dos guardias civiles y un traductor españoles, víctimas de un atentado terrorista talibán.
Como en todos los actos oficiales en los que ha participado Zapatero en China y Japón, la victoria de la selección española de fútbol se hizo un hueco en la conversación y Akihito felicitó a España por su triunfo.
Una jornada centrada en la búsqueda de inversiones
Asimismo, Zapatero ha finalizado su primera visita oficial a Japón con una agenda centrada en la búsqueda de inversiones para España y mostró su optimismo ante la posibilidad de que Mitsubishi instale finalmente en Vigo una planta de baterías para vehículos eléctricos.
Éste fue el proyecto sobre el que pivotó su última jornada en Asia, un viaje en el que defendió la solidez de la economía española ante empresarios y medios de comunicación chinos y japoneses, y explicó las reformas emprendidas por su Gobierno para ganar la confianza de los inversores extranjeros.
Zapatero se ha reunido con un nutrido grupo de empresarios miembros de la patronal nipona y mantuvo una entrevista con el presidente de honor de Mitsubishi, Mikio Sasaki, a quien reiteró el interés de España por el proyecto de la fábrica de baterías de litio que quiere instalar esta empresa en Europa.
España compite con Austria para hacerse con esta planta y la decisión se conocerá en un mes, pero Zapatero manifestó una impresión "favorable" tras reunirse con Sasaki.
Se trataría, según apuntaron fuentes de Industria, de la mayor fábrica de baterías de litio para vehículos eléctricos de Europa con una inversión cercana a los 500 millones de euros, lo que supondría crear numerosos puestos de trabajo en la zona en la que se encuentra la factoría de PSA Peugeot-Citroën.
Para dejar claro que el Gobierno respalda sin fisuras el proyecto, Zapatero tomó el tren bala hasta Kioto para visitar la fábrica de GS-Yuasa, empresa asociada con Mitsubishi para la fabricación de las baterías.
