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TRAS MANTENER CONTACTOS DIRECTOS CON LOS TERRORISTAS

Los 'verificadores' del alto el fuego piden a ETA que sus miembros no lleven armas

Los seis miembros del grupo de verificadores internacionales del alto el fuego de ETA concluyen que los terroristas "siguen cometiendo actos ilegales como la falsificación y el mantenimiento de arsenales" aunque aseguran que la banda terrorista les ha trasladado su compromiso con el cese definitivo de la actividad armada.

La Comisión Internacional de Verificación ha anunciado que ha mantenido "contactos directos" con ETA en los que la banda terrorista ha manifestado su compromiso con el alto el fuego y el cese definitivo de su actividad declarado el pasado 20 de octubre.

No obstante, estos verificadores concluyen que los terroristas "siguen cometiendo actos ilegales como la falsificación y el mantenimiento de arsenales" al tiempo que han advertido a la organización criminal de que "la posesión continuada de explosivos y armas puede dar lugar a situaciones potencialmente peligrosas".

La CIV excluye al PP de su ronda de contactos
Los integrantes de la "Comisión Internacional de Verificación del alto el fuego en el País Vasco" (CIV) han mantenido ayer y hoy en Bilbao contactos con políticos y agentes sociales vascos, tras los cuales han hecho público un informe sobre cómo ven la situación.

"La posesión de armas puede dar lugar a situaciones peligrosas"

En estos encuentros se han reunido con representantes de PSE-EE, PNV y la izquierda abertzale, pero no con miembros del PP, según han confirmado fuentes populares. También se han reunido con los principales sindicatos (UGT, CCOO, ELA, LAB), la patronal Confebask, representantes de la Iglesia y "autoridades" del País Vasco.

En dichas reuniones,l a comisión ha recibido información de que han cesado los asesinatos, atentados, agresiones, amenazas y extorsiones desde que ETA declaró un alto el fuego el 8 de enero de 2011 y anunció el fin definitivo de la violencia el 20 de octubre del pasado año.

ETA sigue siendo una organización "clandestina y armada"
La CIV opina que ambas declaraciones "forman parte de un proceso irreversible", de manera que "ETA no tiene intención alguna de cometer u organizar actos de terrorismo o violencia en el futuro".

No obstante, ha admitido que ETA sigue siendo una organización "clandestina y armada" y, como tal, sigue cometiendo actos ilegales como la falsificación de documentos y el mantenimiento de arsenales.

"A pesar de que estos actos son ilegales, no están necesariamente relacionados con la preparación de actos violentos", han opinado en su informe los miembros de este grupo.

Por otro lado, la Comisión ha recibido información sobre temas que considera que no están relacionados directamente con el alto el fuego, como "que se han producido incidentes aislados de desordenes de tipo kale borroka, que han sido rechazados por todos los partidos políticos del País Vasco", así como cuestaciones realizadas a favor de los familiares de los presos.

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