El proceso de recuperación del rey Juan Carlos avanza mejor de lo esperado. Cuando se cumplen tres meses desde su última intervención, el neurocirujano que le interno, Manuel de la Torre, ha asegurado que el monarca podrá hacer su vida sin ningún tipo de limitación.
El doctor De la Tore explica cómo evoluciona el monarca: "Es imposible ir mejor; todos estamos contentos, absolutamente satisfechos, entusiasmados con la evolución tan sumamente asombrosa que tiene. No tiene dolor y no toma aspirinas. El que lleve muletas es anecdótico y secundario". Prueba de ello son los seis kilómetros que don Juan Carlos recorre semanalmente dentro de sus ejercicios de rehabilitación.
De la Torre prefiere no hacer pronósticos sobre cuándo se podrá ver al Rey en plena forma: "Cuando llegue el momento, que llegará, será de una manera natural. Los plazos son absolutamente abiertos".
Además, confirma que el monarca está animado: "Tiene ánimo, ilusión, fortaleza y unas ganas de trabajar inmensas. Está con mucha energía y un excelente humor. Siempre va por delante y muy rápido".
Ahora, el trabajo del Rey consiste en caminar un kilómetro y medio al día, ejercicios de fisioterapia y de rehabilitación específicos para cada grupo muscular. También ejercicios de piscina, todo ello durante cuatro horas diarias, repartidas en sesiones de mañana y tarde.
A tres meses vista, y desde un punto de vista personal, el doctor recuerda como "un tremendo reto y un altísimo honor" haber operado al Rey "y más de una patología compleja de columna", si bien insiste en que, una vez en la mesa de operaciones, él se abstrae de quién es la persona y, como con cualquier otro paciente, trata de hacerlo "lo mejor posible".