Los jeques árabes vuelven a interesarse por España

Los árabes son los más interesados en comprar villas, les gusta España y por eso, eligen la Costa del Sol.

Sólo en el último año, las ventas de inmuebles han crecido más de un diez por ciento. Vienen con los bolsillos llenos buscando seguridad y privacidad.

Setareh Mohregi, directora comercial Gilmar Puerto Banús, asegura que " el comprador áraba no pide préstamos, viene con el dinero en mano".

Impuestos muy altos en su país y vuelos directos hasta Málaga les anima a venir. Con un poderío económico que notan las cajas registradoras de los negocios.

En una de las zonas más lujosas de Madrid, casas con precios de más de tres millones de euros atraen, especialmente, a inversores venezolanos y mexicanos. Las ventas van a buen ritmo. Antes tardaban más de un año en quitar el cartel de se vende, ahora "se ha reducido casi a la mitad. Tardamos unos seis meses u ocho meses" afirma Gonzalo López-VanDam , propietario de Promora.

No ocurre lo mismo con el inversor ruso. Su presencia ha disminuido en el último año debido a la devaluación de su moneda.