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Boxeo

José Antonio López Bueno, de campeón del mundo de boxeo a las colas del hambre: "Cogí una caja de pastillas"

Hace dos décadas, López Bueno tocó el cielo del boxeo. Ahora ha tocado fondo y está en paro en Zaragoza: "Las he pasado muy jodidas".

En Zaragoza, en una de las colas del hambre tristemente tan frecuentes últimamente en nuestro país, nos encontramos con José Antonio López Bueno. Hace 21 años se proclamó campeón del mundo de boxeo.

José Antonio López Bueno ha pasado de tocar el cielo a finales de los 90 a tocar fondo dos décadas después: "Las he pasado muy jodidas. Cuando dejas de tener miedo a todo es muy complicado".

Tras varios títulos nacionales, continentales y la conquista del cinturón de campeón del mundo en peso mosca, pasó de ser un campeón a las colas del hambre: "Afortunados como yo no dejamos de ser estrellas fugaces".

"Me tenían que haber dado una paga"

Y es que la gloria duró poco: "La mayoría de los golpes que me he llevado han sido fuera del ring". El peor golpe, el de realidad: "Cogí una botella y una caja de pastillas y me dije... '¿qué, me voy a recrear un rato?".

Sin trabajo, sin recursos, no le ha quedado otra que engrosar las colas del hambre: "Me tenían que haber dado una paga antes dejar mi carrera deportiva, porque el boxeador se queda sonado".

A sus 46 años se plantea volver a ponerse los guantes y volver a retomar su trayectoria. Seguiría así la senda de Mike Tyson y Poli Díaz.