Platos para una cuaresma de rechupete: los mejores trucos y lugares para disfrutar de esta gastronomía de ayuno

Tratar de emular el ayuno de Jesús o de Moisés en el desierto. Un momento de purificación física y espiritual en el que la carne pierde todo protagonismo. Potaje con berros, judías pintas, mazorca de maíz y azafrán, como el que se come en Gran Canaria. Potaje de habas secas con patatas, pimientos, zanahorias, cebollas, puerros y fideos o arroz, en el caso de Málaga.

Si nos decantamos por el bacalao hay numerosos lugares donde podremos alucinar con este pescado. Desde el restaurante Solleiros, en Santiago de Compostela, al Patanegra en Zamora pasando por el Peix i Brases en Denia, Alicante. Entre los últimos que han merecido reconocimiento en concursos está el realizado por la Escuela de Hostelería 'La Cónsula' en Málaga.

Un gazpachuelo de bacalao con puré de ajo y cebolla, piel crujiente y cristal de azafrán (os dejo una fotografía para que alucinéis con su aspecto). Jairo Soria, de Rocacho, nos explican cómo lo preparan ellos (os dejo su receta).

En este periodo de abstinencia, el dulce tiene también su parte de protagonismo. Y la torrija es la reina. Tal es el éxito de esta elaboración dulce que muchos restaurantes ya la han dejado en sus cartas de forma permanente. Entre las que destacan está la que elaboran en Madrid La Duquesita, Mifer o la de Sergio Hernández en Taramara (nos ha contado su truco para que os queden igual de jugosa), Dulce Ángel en Granada o Nava en Zaragoza.

La cuaresma más allá de la carne.