Las obras de Veláquez, Goya o Zurbarán cambian según los ojos de quien las mire. 'La Fragua de Vulcano' o 'La Ofrenda de Baco' son cuadros que cobran otro sentido a través de los ojos de un niño.
Y es que cientos de jovenes participan durante este verano en los cursos de verano que organiza el Mueso del Prado para acercar su extensa colección de pinturas a los más jóvenes.
El objetivo es jugar con la tierra, aire, agua y fuego que los maestros como Sorolla o Zurbarán han utilizado en sus obras. Una vez estudiados todos los cuadros, los más pequeños practican todo lo aprendido en la sala de exhibición. Algunos apuntan maneras y tienen muy claro que de mayor quieren ser artistas.