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Rinna Cooke se quedó devastada cuando descubrió que a su mascota le quedaba poco tiempo de vida. A Romero, su perro bóxer de nueve años, le diagnosticaron un cáncer de hueso inoperable.

Para hacer que sus últimos días fuesen los más felices esta canadiense hizo una lista con 22 últimos deseos para su perro. Desde subirse a un coche de bomberos y a otro de policía hasta tener una cita o desayunar en la cama, toda atención era poca.

En una entrevista con el Daily Mail declaró que "pudimos completar la lista e incluso Romeo visitó Estados Unidos". Finalmente Romeo tuvo que ser sacrificado pero Cooke señala que "espero que compartir esta lista de deseos de Romeo pueda ayudar a otras personas que están pasando por una situación similar con su mascota".

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