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SE EXIGE MÁS A LAS COMPAÑÍAS

El Parlamento Europeo reivindica los derechos de los pasajeros aéreos

El pleno del Parlamento Europeo ha rechazado este miércoles reducir las compensaciones por retrasos en los vuelos que reciben los pasajeros y ha pedido que se exija a las compañías aéreas que permitan a sus viajeros embarcar en cabina con abrigo, compras y bolso de mano, además de con el equipaje de mano autorizado.

La Eurocámara reivindicó nuevos derechos para los pasajeros aéreos, incluida la opción de usar el vuelo de vuelta aunque no se utilice el de ida, subir siempre con una bolsa de mano además del equipaje a cabina o el establecimiento de compensaciones mínimas en caso de retraso.

Los eurodiputados abogaron por establecer negro sobre blanco en el futuro reglamento derechos de pasajeros concretos para evitar que como en la anterior regulación, las compañías utilicen las lagunas legales para restar derechos o hacer pagar por ellos.

El pleno del Parlamento Europeo avaló que ninguna compañía pueda impedir usar el billete de vuelta si no se usó el de ida, ni tampoco restringir el subir a cabina, además del equipaje reglamentario, con objetos personales como un bolso, un abrigo o las compras adquiridas en el aeropuerto, como ocurre en la actualidad en algunas aerolíneas.

Igualmente, reclamaron incluir en el futuro reglamento de derechos de pasajeros compensaciones en caso de retraso de entre 300 y 600 euros según las horas de espera y distancia del vuelo, esto es, más elevadas de las pedidas inicialmente por la Comisión Europea (CE). Pidieron que en el reglamento se establecerá por escrito en lista cerrada los casos en los que las aerolíneas pueden denegar compensaciones o asistencia.

Así, las "circunstancias extraordinarias" que les permitirían rechazar el pago de compensaciones quedarían limitadas a una serie de acontecimientos fuera del control de la empresa como el caso de la nube de ceniza provocada por la erupción del volcán Eyjafjallajökull en abril de 2010.

Dejando a un lado esas coyunturas de fuerza mayor, las aerolíneas deberán en casos de retraso ofrecer una compensación además del reembolso del importe del billete y/o una ruta alternativa. Los eurodiputados también quieren obligar a las aerolíneas a designar a una persona en el aeropuerto para informar y ayudar a los pasajeros durante posibles retrasos, cancelaciones, pérdidas o retraso del equipaje.

La Eurocámara abogó por establecer un principio de silencio administrativo positivo para evitar que las compañías demoren al máximo sus respuestas para conseguir que el viajero desista, esto es, que en caso de que transcurran más de dos meses sin que las aerolíneas hayan respondido a una reclamación, esta se considerará aceptada.

Por otro lado, los eurodiputados rechazaron por 227 votos a favor, 389 en contra y 45 abstenciones una enmienda introducida por el grupo de los conservadores británicos para que el reglamento fuera de aplicación en Gibraltar.

El eurodiputado euroescéptico William Darmouth había pedido el apoyo a la enmienda en el debate previo al voto señalando que "como consecuencia de las demoras inaceptables provocadas por el Gobierno español en la frontera terrestre, la frontera aérea ha adquirido problemas enormes".

El popular español Luis De Grandes recordó a Darmouth que una delegación de la CE ya inspeccionó en septiembre el caso y concluyó que en ese paso "no se ha producido ningún abuso, sino un equilibrio y muchos esfuerzos para evitar el contrabando".

Finalmente en el texto no figura la palabra Gibraltar, pues así lo pedía una enmienda del grupo liberal europeo (ALDE) que sí salió adelante. También intervino en el debate la socialista Inés Ayala, quien destacó que la aparición de nuevas compañías y el nuevo concepto de compañías de bajo coste ha dado lugar a una nueva tipología de abusos que este reglamento contribuirá a paliar.

Por último, la eurodiputada del Partido Nacionalista Vasco (PNV) Izaskun Bilbao dijo que el futuro reglamento "es imprescindible para ordenar el sector" y señaló que "la indefinición de la anterior normativa generó picaresca" entre las aerolíneas. Tras el voto, el comisario europeo de Transporte, Siim Kallas, se mostró satisfecho por la luz verde la Eurocámara al reglamento y señaló que "es un gran paso que los derechos de los pasajeros estén reflejados en papel".

"Ya es bastante terrible quedarse encallado en el aeropuerto, ya sea en vacaciones o en viaje de negocios, como para que las reclamaciones no se faciliten y se conviertan en una pesadilla", señaló.

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