Publicidad

ALGUNOS SON ROBADOS

Compra y venta de coches en plena vía pública

En algunas ciudades, muchos vendedores de vehículos se han propuesto intensificar sus ventas trabajando a pie de calle. Aparcan los coches, les ponen un letrero de "Se vende" y convierten la calle en un mercadillo de automóviles de segunda mano.

La ocupación de la vía pública destinada a la venta está prohibida y sancionada con 300 euros de multa. Aun así en muchas ciudades se está extendiendo la venta ambulante de coches de segunda mano.

Los vendedores aparcan los coches, cuelgan el cartel con el precio y en pocos minutos muchos viandantes se interesan por la oferta. Regateo sin disimulo por vehículos cuyo coste a pie de calle va desde los 600 hasta los 7.000 euros.

Algunos de los vehículos, según afirma la policía, son robados. Los comerciantes suelen evadir impuestos, no ofrecen garantía por los coches, tampoco licencia ni certificado de origen.

A pesar de ello entre compradores y vendedores hay más actividad que en los diez concesionarios de la calle. Muchos de los clientes vienen acompañados por sus familias para realizar la compra.

 

 

Publicidad