Casa Blanca
Trump derriba el Ala Este para su Salón de Baile: 250 millones, 8.400 m² y 999 invitados "sin coste para el contribuyente"
El presidente anuncia una reforma “financiada con fondos privados” para levantar un salón de más de 8.000 m² en el Ala Este. La obra derriba oficinas de la primera dama y un teatro, pese a que prometió no tocar la estructura histórica. “Va a ser uno de los salones de baile más bonito del mundo”, presume.

Publicidad
Donald Trump presume de haber arrancado la obra con la que, según dice, logrará lo que “todos sus predecesores han anhelado y ninguno ha conseguido”. La Casa Blanca confirmó en X que han comenzado los trabajos para construir un nuevo Salón de Baile en el Ala Este: tendrá capacidad para unas 1.000 personas, una superficie “de más de 8.000 metros cuadrados” (el proyecto habla de 8.400 m²) y un presupuesto de 250 millones de dólares.
En julio, el propio mandatario lo anunciaba a voz en grito desde una terraza: “Va a ser uno de los salones de baile más bonito del mundo”.
La intervención ya ha convertido en escombros oficinas de la primera dama, un teatro y una de las entradas para visitantes extranjeros, pese a la promesa inicial de no tocar la estructura del edificio histórico. Ante un grupo de atletas de béisbol, Trump justificó la escala del plan comparando el espacio actual con el futuro: “Este era el salón de baile, y tiene capacidad para 88 personas. El nuevo tendrá capacidad para 999, lo cual es una diferencia”.
Quién paga la factura
Según el mensaje oficial difundido por la Casa Blanca, “se ha financiado mediante fondos privados no le costará nada a los contribuyentes”. El presidente abunda en esa idea con su habitual énfasis: “El Salón de Baile va a ser precioso. Habrá bebidas, cócteles, de todo... Verán un salón que no creo que nadie supere, será el mejor. Va a ser muy divertido”.
Y remacha que “no hay de qué preocuparse, es un proyecto muy necesario y que no va a suponer ningún coste para el contribuyente. Ha sido financiado por patriotas, grandes empresas y, por supuesto, por él mismo”.
Otros presidentes, recuerda Trump, tuvieron que recurrir a hoteles cercanos o a los jardines para acoger grandes recepciones. El Ala Este, levantada en 1902, ha vivido reformas notables, como la de Harry Truman en 1948; la actual aspira a dejar una huella aún mayor.
La Casa Blanca subraya que el nuevo salónbusca recuperar la cultura del baile y la música en la residencia oficial (la imagen de Trump bailando con Melania ya recorre las redes), y servir para grandes cenas de Estado y actos de proyección internacional.
Un sello personal y nuevas ambiciones urbanas
El gusto de Trump por los dorados, el boato y la escenografía vuelve a dominar la estética del proyecto. En paralelo, el presidente planea también levantar en Washington un arco del triunfo para conmemorar el 250º aniversario de la independencia el 4 de julio de 2026. La idea, como el salón, pretende “dejar huella” en la capital y consolidar un relato de grandeza ceremonial para su mandato.
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y no te pierdas la última hora y toda la actualidad en nuestro perfil de Google.
Más Noticias
Puedes ver el informativo completo 'Noticias 2' en Atresplayer.
Publicidad