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INTENTO DE GOLPE DE ESTADO EN ECUADOR

Correa: "Si quieren matar al presidente aquí está. Mátenme si les da la gana"

Un grupo de agentes de Policía le reprochó al presidente Correa la bajada de sus sueldos.

"Si quieren matar al presidente aquí está. Mátenme si les da la gana, mátenme si tienen valor, en vez de estar en la muchedumbre cobardemente escondidos". Así contestaba el presidente de Ecuador, Rafael Correa, a los policías que se habían sublevado.

Ellos respondían lanzándole gases lacrimógenos. Al final de la trifulca, el presidente resultaba dañado en una pierna de la que estaba convaleciente y Correa junto a sus escoltas conseguían refugiarse en un hospital que inmediatamente era tomado por los agentes.

Detrás de este levantamiento policial está una nueva ley de reducción del gasto estatal que supondría el recorte de sus sueldos y el aumento de los años para conseguir un ascenso.

Pero la protesta iba en aumento y los policías buscaban el apoyo del Ejército. Tan solo se le sumaban algunos soldados, pero se hacían con el control del aeropuerto de la capital y tomaban la asamblea nacional.

Los detractores del presidente llegaban incluso a entrar por la fuerza en la televisión estatal. La tensión ya estaba en las calles y también la división entre los que apoyaban y los que no al presidente.

Los enfrentamientos con gases lacrimógenos fueron contínuos y varias personas resultan heridas. Las autoridades declaraban el estado de excepción.

La cúpula militar tomaba partido del lado del presidente aunque le pedían que derogue la polémica ley por la que se sublevaron los policías.

El presidente desde el hospital hablaba de que en realidad era víctima de un golpe de estado. La noticia del secuestro del presidente llegaba a las calles y miles de seguidores se congregaban frente al palacio presidencial para exigir su liberación.

En ese hospital ha permanecido retenido más de 10 horas y este episodio ha traído a la memoria la tradición golpista del país.

 

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