El precio de la soledad: En Japón pagan hasta 60 euros por fotografiarse con un desconocido para aparentar tener amigos

Contratar personas para tener citas ficticias o un amigo para ir acompañado a actos sociales no solo posible, sino que es ya un negocio boyante en Japón.

A partir de 60 euros se puede elegir en un catálogo de actores la persona que más nos conviene para no estar solos en eventos sociales, como por ejemplo una boda. El auge de este negocio se debe a la fuerte presión social por mantener las apariencias en los países asiáticos.

En China, es habitual que en épocas especiales como la navidad mucha gente contrate una pareja de alquiler. Por ello existen ya empresas que ofrecen servicios de todo tipo de compañía para simular una vida que no existe.

Y aunque a algunos les parezca una locura, se trata de un negocio muy rentable. "Entiendo el oportunismo de un negocio así, porque en el momento en que una persona piense que está cubriendo una necesidad, va a aumentar la cuota", señala un psicólogo.

De hecho, más de 1.200 trabajadores forman ya parte de una empresa japonesa que se dedica a estos servicios.

Son actores que se dedican a maquillar la realidad y el producto estrella de estos servicios es el uso de actores para hacerse selfies y publicarlos en las redes sociales. Un encargo que puede llegar a costar 60 euros por fotografía y que puede aumentar a 250 euros en caso de que el actor acompañe al cliente a una boda.

Los psicólogos advierten de que aparentar se ha convertido ya en un requisito indispensable para encajar en la sociedad, pero señalan que si queremos relaciones auténticas, lo mejor es el método tradicional.