Sucesos

Un joven británico muere en Grecia tras decapitarle la hélice del helicóptero en el que montaba por hacerse un selfie

Un chico de 22 años ha muerto en Grecia después de intentar hacerse un selfie en un helicóptero y decapitarle las hélices, cuando estaba de vacaciones con sus padres y algunos amigos. Hay tres detenidos, entre ellos el piloto del helicóptero.

Imagen de un helicóptero

Imagen de un helicóptero EFE

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Trágico suceso el ocurrido en Grecia después de que un joven de tan solo 22 años haya perdido la vida. El muchacho, de origen británico, estaba de vacaciones con sus padres y unos amigos. Perdió la vida después de intentar hacerse un selfie cuando montaba en un helicóptero en el aire, y las hélices del aparato le decapitaron. De cerca, sus padres montaban en otro helicóptero, cuyo piloto giró todo lo que pudo para evitar al matrimonio ver la horrible escena.

La terrible muerte se ha producido en Mykonos, una de las islas con más presencia turística en Grecia. El joven, un estudiante de Oxford que había asistido a escuelas de élite y formaba parte de una familia muy bien posicionada económicamente, cometió una grave imprudencia, dado que se acercó demasiado a las hélices y puso en riesgo su vida con tal de conseguir la ansiada fotografía, que terminó llevándole a la muerte.

El piloto del helicóptero en el que montaba el joven y otros dos ingenieros han sido detenidos y posteriormente liberados por las autoridades tras la muerte del joven. El primero está acusado de un presunto delito de homicidio involuntario, al haber dejado que el muchacho pudiera asomar la cabeza por fuera del helicóptero cuando todavía no habían aterrizado, por lo cual podría acarrear responsabilidad penal para él, y aún queda pendiente saber si los dos ingenieros también podrían ser llevados ante la justicia.

Advertencias por las imprudencias con los selfies

Cada vez es más frecuente que se oiga hablar de muertes accidentales por culpa de los selfies. Las autoridades ya avisan de que nadie debe poner en riesgo su vida ante un reto o intento de hacer una fotografía, por muy espectacular que sea. Selfies desde lo alto de un acantilado, al borde del precipicio, en un transporte peligroso, o en una zona donde está prohibido hacerse fotos, son el ejemplo de muchas personas que han perdido la vida en un intento de impresionar al mundo.

Y es que, precisamente, el hecho de impresionar el mundo, ha sido lo que ha terminado costando la vida a más de una persona, al cometer una grave imprudencia donde se expuso demasiado y terminó quemándose por jugar con fuego. Otra de las características que señalan las autoridades es la ineficacia de esos 'selfies sorprendentes', dado que hay gente que puede creer que han sido creados por Photoshop o creados digitalmente. Queda avisado así, que la vida está por encima de cualquier heroicidad.

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