Sarkozy tiene problemas con el rígido protocolo del G-20

Uno a uno, Sarkozy ha ido saludando a todos. Una banda de música ha acompañado la llegada de cada uno de los coches. Los mismos compases se han repetido hasta en una veintena de ocasiones.

Cuando ya parecía que estaban todos, Sarkozy se retira, pero uno de sus asesores le advierte que falta alguien-más. El presidente regresa, con cara de estar un poquito harto, y la música vuelve a sonar. Ahora, quien llega es la presidenta argentina, Cristina Fernandez de Kichner.

Precisamente la presidenta argentina ha provocado otro momento curioso cuando ha saludado a José Luis Rodríguez Zapatero. Ambos han dialogado durante un buen rato. Cristina Fernández de Kirchner parecía muy interesada en contarle algo al Presidente del Gobierno. Y todo bajo la atenta y curiosa mirada de la vicepresidenta Salgado.