El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, ha expresado su preocupación por lo sucedido a un grupo de activistas españoles en El Aaiún, aunque ha señalado que el Ejecutivo todavía espera las explicaciones de Marruecos y apostó por una diplomacia "inteligente y sensata".
"Puede que algunos se empeñen, pero es un principio esencial de la política exterior del Gobierno que presido mantener una buena relación con un país vecino como Marruecos, con el que compartimos muchos intereses y temas esenciales de estabilidad, seguridad y también económicos, que están en juego", ha manifestado en rueda de prensa en Shanghái.
Zapatero ha recordado que el ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, ha pedido al secretario de Estado de Asuntos Exteriores que recabe las explicaciones "oportunas" sobre el trato que recibieron varios activistas españoles que fueron retenidos en El Aaiún tras una protesta en favor del pueblo saharaui y que aparecieron visiblemente golpeados.
Los 14 españoles que participaron el pasado sábado en El Aaiún en una protesta en apoyo al pueblo saharaui, 11 de los cuales fueron retenidos en comisaría, han llegado hoy a España. El grupo, integrante de la asociación "SaharAcciones", organizó el pasado sábado una manifestación en el centro de la capital administrativa del Sáhara Occidental para "evitar que la lucha saharaui caiga en el olvido y reivindicar el derecho de ese pueblo a la autodeterminación".
A la espera de que las autoridades marroquíes les trasladen su versión de lo sucedido, Zapatero declinó hacer más comentarios, aunque recalcó que el Gobierno y el Ministerio ya han expresado su "preocupación". "A cada situación de dificultad le ponemos una dosis de diplomacia, diplomacia firme, pero diplomacia inteligente y sensata; no vamos a caminar por otros derroteros", concluyó.
