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CONCLUSIONES DE LA CUMBRE EUROPEA

Zapatero anuncia un techo de gasto de obligado cumplimiento para el Estado

El presidente del Gobierno considera "muy satisfactorio" el acuerdo alcanzado para la "estabilidad económica y la respuesta definitiva a la crisis más grave en ochenta años" y anuncia unas nuevas reglas de gasto para el Estado y comunidades autónomas vinculadas al PIB.

El jefe del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, aunció hoy que creará una comisión asesora de competitividad y reformará la ley de estabilidad presupuestaria para controlar el gasto de la Administración General del Estado en base al crecimiento del PIB nominal a largo plazo.

Estas son dos de las nueve medidas con las que España quiere cumplir el pacto del euro aprobado en Bruselas y que Zapatero ha presentado al concluir la cumbre europea, con el objetivo de "reforzar la respuesta a la crisis económica y fortalecer las bases de nuestra economía cara al futuro".

La mayoría de las medidas del plan ya están en marcha, previstas o anunciadas, como la reforma de la negociación colectiva, que el Gobierno espera plasmar en un proyecto de ley antes de que termine abril; o un "plan contra el empleo irregular", que se aplicará desde junio hasta diciembre de 2012 para hacer aflorar economía sumergida.

Todos miran a Portugal
José Sócrates se ha llevado todas las miradas en la primera jornada de la Cumbre Europea. El primer ministro en funciones de Portugal ha querido estar a pesar de su reciente dimision para defender los intereses de su país. Y esos son evitar la intervencion europea pero al plan de rescate comunitario ya se le ha puesto cifra: 75.000 millones de euros.

El presidente de la Union Europea, el también portugués, Durao Barroso, ha pedido tiempo para que Portugal pueda resoover por sí mismo el problema. Pero sobre la mesa había más temas.

Los Veinsiete han dado luz verde al pacto por el euro y han acordado incrementar el fondo del rescate financiero para antes de junio. Detrás esta el intento por lanzar un mensaje de confianza y fuerza a los mercados, aunque con la crisis portuguesa las especulaciones de contagio son muchas. España las encebeza y por eso el gobierno ha decidido anticiparse.

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